Entre el público hay alguien que está reuniendo fuerzas para gritarle algo a Bob Dylan porque cree conocerle y le exige con voz nerviosa «¡Toca una canción protesta!». Bob Dylan se vuelve hacia los miembros de la Rolling Thunder, los mira, se gira de nuevo hacia el micrófono: «Ahí va una para ti» y le sigue un lamento lloroso «Oh, Sister».
Como decía el critico de rock David Means: «Cuanto más sepas sobre Bob Dylan, menos le conoces». Para 1975, cuando Dylan se embarcó en el Rolling Thunder Tour por pequeños teatros de Nueva Inglaterra, los fans ya habían conocido muchas facetas de Dylan: Dylan el cantante protesta, Dylan electrico, Dylan e incluso el Country & Western Bob.
Pero en 1975, Dylan era otro. El eterno Dylan contra Dylan. Un personaje que llevaba más de una década luchando contra su propia leyenda.
Ese año, Bob Dylan se acababa de separar de su mujer Sara y mudado solo a un apartamento en Greenwich Village. Había juntado a un buen puñado de músicos y amigos para irse de gira por todo el país. Lo llamó The Rolling Thunder Revue. Joan Baez, Roger McGuinn, y Ramblin’ Jack Elliott. Bob Neuwirth lideraba la banda de apoyo, incluyendo a T-Bone Burnett, Mick Ronson, David Mansfield, Steven Soles, y de las sesiones de grabación de Desire, Scarlet Rivera, el bajista Rob Stoner, y batería Howie Wyeth.
Desire sería su décimo séptimo álbum de estudio en el que contaría con muchas de las colaboraciones de la primera parte de la gira Rolling Thunder y algunos rostros nuevos como la violinista Scarlet Rivera, la vocalista Emmylou Harris y el autor teatral Jacques Levy con el que escribiría al menos 7 temas nuevos para el LP.
Desire se publicaría el 5 de enero de 1976, justo en medio de las dos partes en las que se dividió la gira americana Rolling Thunder Revue.
Pese a que el disco se popularizó por el tema de apertura «Hurricane», canción dedicada al caso judicial del boxeador Rubin Carter, cada uno de los temas de Desire, incluidos sus descartes son temazos con unas características muy especiales.
Desde los 11 minutos de «Joey» que relata las andaduras del miembro de la mafia Joey Gallo hasta los toques de violín zíngaro de Scarlet Rivera y el exostismo de «Mozambique».
En Desire, tengo recuerdos que ilustran episodios inolvidables de mi vida, recuerdan a amigas, amigos, noches en un escalón de Málaga tocando la guitarra hasta bien entrada la noche, besos en callejones, alguien que se va, la noche que se acaba…