Lo que el mundo le debe a Knockin’ On Heaven’s Door

No se puede decir que me considere fan de los Guns N’ Roses. Aunque les reconozco algún buen tema, la versión de Knockin’ On Heaven’s Door no solo no está entre ellas, sino que creo que nunca debió existir.

La canción que Dylan compuso para la banda sonora de la película de 1973 de Sam Peckinpah no solo fue su vuelta a la escena (su último álbum de estudio, New Morning, es de 1970) sino que supuso una demostración de destreza majestuosa e inspiración inigualable. El encargado de supervisar la banda sonora de la película ‘Pat Garrett and Billy the Kid’, Jerry Fielding, compositor y arreglista habitual de Peckinpah puso muchas pegas a la obra de Dylan, pero éste tendría que componer la música si quería salir en la película.

El encargado de escribir el guión, Rudy Wurlitzer, amigo de Bob Dylan ya tenía su trabajo terminado cuando se vieron en su apartamento de Nueva York. Dylan le confesó que se sentía muy conectado a Billy el Niño que «de algún modo era su reencarnación, estaba obsesionado con el mito». Entonces Wurlitzer rehizo su trabajo para incluir el personaje de Alias que significaría el debut como actor de Bob Dylan.

Mientras se hacía el rodaje, Dylan escribía y grababa la banda sonora, que se hace en tres sesiones en un estudio de la CBS en Méjico. Fielding le rechaza algunos temas y Dylan se ve obligado a escribir nuevos para sustituirlos. Uno de los nuevos será ‘Knockin’ On Heaven’s Door’. Un tema que deja boquiabierto a todo el equipo de rodaje. Se trata de una balada muy sencilla, con tres acordes (Sol, Re y La menor) y un estribillo con mucha sonoridad. Dos estrofas con un mensaje antibelicista claro, dirigido a su país, que aún arrastraba el trauma de la salida de la guerra de Vietnam. Un mensaje de paz.

La banda que interviene en la grabación original del tema son Roger McGuinn a la guitarra, Terry Paul al bajo, Jim Keltner a la batería, Carl Fortina en el armonio y Bod Dylan a la guitarra y voz. El coro estaba compuesto por Carol Hunter, Donna Weiss y Brenda Patterson.

Keltner relata su experiencia mientras grababan el nuevo tema: «En aquel momento, nos encontrábamos en un gran estudio, y veíamos en una enorme pantalla en la pared [con] la escena que se desarrollaba mientras tocábamos. Lloré durante toda la toma.»

La canción ofrece una fórmula seductora. Se trata de una especie de gospel rock cuyo primer verso está inspirado en las últimas palabras que pronuncia el personaje del sheriff Colin Baker en la película, herido de muerte por la banda de Billy el Niño en presencia de su mujer: «Mama take this badge from me, I can’t use it anymore».

La combinación de las guitarras de Roger McGuinn, con sus arpegios y el característico rasgueo de Dylan, envueltos de una enigmática reverberación que juntos sirven de contexto para los versos de Dylan es potentísima. La canción es un golpe de genialidad y un éxito a ambos lados del Atlántico. Habrá múltiples versiones del tema: instrumentales y variantes con la voz. La versión orquestada y con voz será la que finalmente se incluirá en el disco de la banda sonora.

La mejor versión de Knockin’ On Heaven’s Door es de Bob Dylan

Knockin’ On Heaven’s Door es una de esas canciones gastada y maltratada por tantas versiones que nunca debieron hacerse. A la que menos aprecio tengo es la de Guns N’ Roses, por la popularidad que tuvo, hasta el punto que muchos de sus seguidores llegaron a pensar que era una canción original del grupo californiano.

En 1994, el formato acústico de la MTV ‘Unplugged’ ya era un éxito que proyectaría la imagen de grupos jóvenes como Nirvana, Pearl Jam o Stone Temple Pilots. También le serviría como escaparate ante un nuevo público joven a artistas consagrados como Eric Clapton o Rod Stewart.

En noviembre de ese año, Dylan grabó dos noches en el formato MTV Unplugged, justo después de sus dos álbumes de estudio, Good As I Been To You de 1992 y World Gone Wrong de 1993 , ambos acústicos en solitario (algo que no había hecho desde principios de los años 1960) e incluían canciones populares tradicionales en lugar de composiciones propias.

Las sesiones de Dylan de los acústicos de la MTV despertaron mucha expectación previa a su grabación. Nadie sabía qué iba a inventar para este formato. Había quien pensaba que haría una actuación en solitario con su guitarra y armónica como sus orígenes de cantante folk y los había quienes especulaban con un homenaje a su mítico Dylan Goes Electric del Festival de Newport del 65. La lista de canciones también fue objeto de mucha especulación. En definitiva, Dylan hizo de Dylan y nadie supo qué iba a hacer hasta que subió al escenario con su banda.

En total, las dos noches, Dylan tocó 23 canciones, algunas repitieron en las dos noches. El setlist de la primera noche incluyó algunas rarezas como ‘Hazel’ y ‘Dignity’. También aparecieron canciones míticas que llevaba años sin tocar en directo como el ‘Tombstone Blues’ y ‘With God On Our Side’. El setlist de la segunda noche sí estaba compuesto por clásicos de los 60 más reconocibles como ‘All Along the Watchtower’, ‘Rainy Day Women #12 & 35’ y ‘Like A Rolling Stone’ entre los que se coló su éxito de la banda sonora de la película de Sam Peckinpah, ‘Knockin’ On Heaven’s Door’.

La ejecución del tema es potentísima. La banda y el propio Dylan se ven asombrados por el resultado y por la reacción del público. La espontánea respuesta de la audiencia cuando Dylan pronuncia el verso mítico ‘Mama lay my guns into the ground’ después de su breve solo de armónica, motiva a la banda a hacer un final apoteósico que dejan al propio Dylan atónito, cuando este se gira hacia Tony Garnier para pedirle paso para un solo de guitarra que ejecutaría con una tímida sonrisa de satisfacción bajo sus gafas negras.

Dylan incluye algunas variaciones a la letra, como suele hacer en sus directos. En lugar de dos estrofas como en la original, la versión del Unplugged tendrá una tercera estrofa que no canta al final sino en medio de los dos de la letra original: «Mama, wipe the blood out of my face. I just can’t see through it anymore. Got a lone black feelin’ and it’s hard to trace». Además, al estribillo Dylan introduce un nuevo último verso: «Just like so many times before».


Descubre más desde Dylanitas

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.